MicroSchino
sábado, 21 de agosto de 2010
La Tormenta
Después de la peor de las tormentas que jamás había padecido en sus carnes, aquellas postreras gotas tibias incluso endulzaron su alma aún dolorida por el sufrimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario